El Gobierno y la CGT lograron avanzar la pasada semana en la
conformación de la comisión ejecutiva que tendrá a su cargo la implementación
de la denominada Cobertura Universal de Salud (CUS), aunque el plan que prevé
brindar atención médica a más de 15 millones de personas que hoy carecen de
esos servicios recién comenzará a funcionar el próximo año.
Las demoras se deben a los tiempos requeridos para la
identificación de los posibles beneficiarios, la determinación de las
necesidades de infraestructura y servicios para garantizar la cobertura y la
negociación con las provincias para la puesta en marcha del programa en todo el
país, según explicaron desde la CGT a este diario.
El plan fue lanzado en agosto del año pasado por el
presidente Mauricio Macri a partir de un acuerdo con los gremios cegetistas por
la distribución a las obras sociales sindicales de alrededor de $ 30.000
millones acumulados en el denominado Fondo Solidario de Redistribución (FSR).
Por ese entendimiento, los gremios cedieron $ 8000 millones de esos recursos
para financiar la implementación de la CUS, un fondeo que se incorporó a un
fideicomiso y que por acumulación de intereses trepa en la actualidad unos $
9500 millones. Esos recursos financiarán la puesta en marcha del plan que luego
deberá ser sustentado con aportes del estado.
"Esta es apenas una primera etapa en la que se puso en
marcha el grupo de trabajo que tiene que avanzar con la implementación. Pero
para que esto empiece a funcionar todavía faltan más de 6 meses", indicó a
el diario del dirigente José Luis Lingeri, uno de los referentes de la CGT que
participó ayer del encuentro con el ministro de Salud, Jorge Lemus. De la
reunión también participaron el nuevo superintendente de Servicios de Salud,
Sandro Taricco, y la subsecretaria de Coordinación Administrativa del
Ministerio, María Cecilia Loccisano.
Fuente: El Cronista