Es el primer aumento correspondiente a 2019. La suba
acumulada en los últimos 12 meses supera el 42%.

Este incremento es el primero de 2019, si bien en febrero
pasado hubo un incremento del 5%, aprobado en diciembre de 2018, que cerró el
ciclo de aumentos del año pasado.
En total, y con cargo a 2018, hubo 5 aumentos: 7,5% desde
junio, otro 7,5% a partir de agosto, 8% desde octubre, 8,5% en diciembre y 5%
en febrero pasado. Un incremento total del 42,2%.
La decisión se tomó después de que la Superintendencia de
Servicios de Salud evaluó la situación de las empresas de medicina prepaga y
revisó el incremento de costos del sector, en especial los medicamentos. Para
los próximos meses se esperan nuevos aumentos por el incremento del valor del
dólar y la incidencia del aumento que se acuerde en la paritaria del sector.
En promedio, el costo de los planes de las prepagas es de
entre $ 5.500 y $ 7.000 mensuales para una persona de edad mediana, y es mucho
más alto para los adultos mayores. Un matrimonio joven con dos hijos menores,
por un plan sin reintegros, paga alrededor de $ 12.000 por mes. Y los planes
familiares mayores superan ese importe.
Por esas razones en los últimos meses muchos afiliados se
pasaron a planes más bajos, con menor cobertura o directamente se desafiliaron
de la prepaga.
El sector cuenta con 6 millones de beneficiarios, de los
cuales sólo un millón son voluntarios. Del resto, el grueso deriva sus aportes
de la Seguridad Social a la prepaga a través de las obras sociales y deben
pagar, en caso de corresponder, la diferencia con relación al monto del plan
privado que se vio incrementado, porque los salarios aumentaron mucho menos que
los valores del plan.
Como el salario sigue cayendo en términos reales, se
acrecientan los montos de esa diferencia. Otro sector menor corresponde a
planes corporativos de empresas
Fuente: Clarín