Durante el
Congreso Mundial de Farmacias, se dieron más detalles sobre los objetivos de
esta agencia, que busca limitar los amparos judiciales que desfinancian según
su mirada la seguridad social. Por esta situación, afirman que los jueces están
“co-administrando el sistema de salud”. Piden que la nueva agencia emita
resoluciones de carácter vinculante.
A principio de año
se conoció el caso de Ricardo Piglia, el escritor argentino afectado por
esclerosis lateral amiotrófica (ELA) que reclamó a su prepaga la cobertura de
un tratamiento experimental contra la enfermedad, lo que generó polémica en el
mundo de la seguridad social. Mediante un amparo judicial, la familia reclamó
que se paguen los 100 mil dólares por aplicación que cuesta la droga
experimental GM604, un tratamiento no autorizado por las autoridades sanitarias
de ningún país. El caso muestra una tendencia preocupante, que judicializa la
atención sanitaria, y además de ser peligroso para la salud es una fuente de
desfinanciamiento de los sistemas de atención. Así lo alertan especialistas
reunidos en el último Congreso Mundial de Farmacia, que analizaron el presente
de esta realidad, y destacaron el rol que cumplirá la nueva agencia de evaluación
que busca poner en marcha el gobierno.
La denominada Agencia Nacional de Evaluación de Tecnologías
en Salud (ANETES) está en estos momentos en el Senado nacional, y es una
iniciativa del gobierno nacional, que podría tratarse antes de fin de año. Sus
objetivos y alcances fueron eje de una de las disertaciones del último Congreso
Farmacéuticos Argentino, que finalizó el martes pasado. En la jornada final, el
futuro titular de esta entidad Miguel Secchi habló de los alcances que tendrá
este instrumento, que apunta a estandarizar la cobertura de medicamentos y
otros insumos y estudios por la seguridad social, limitando los amparos que
advierten genera problemas en la salud financieras de obras sociales y toda la
seguridad social en general.
En su exposición, Secchi recordó que las medidas cautelares
tienen dos requisitos: “la verosimilitud del derecho, es decir, que sea creíble
y se acerque a la verdad; y el peligro en la demora”. “Hay una necesidad de que
la futura agencia tenga carácter vinculante, para que los jueces que deben
resolver una medida cautelar o un amparo, se tomen las opiniones que se hacen”.
En este camino, hubo un encuentro reciente en San Luis con
jueces federales, donde se les explicó la necesidad de mejorar esta situación.
“Se invitó a los jueces a que analicen su posición de estar hoy
co-administrando el sistema de salud, y que por lo tanto la consulta a las
sociedades científicas y la calidad de los peritos al momento de dictar
sentencia van a tener mayor y mejor calidad de elementos para tomar una
decisión”, agregó Secchi. “La cautelar es urgente siempre, pero nos encontramos
que muchos fallos están vinculados a lo que se llama ‘justicia a la defensiva’.
Si un juez falle por miedo a ser juzgado, o salir en los medios, estamos mal.
La agencia irá en ayuda con análisis previo, y si corresponde o no la cobertura
que se pide por medio del amparo. Esta es la decisión de las autoridades de
salud actuales”, ratificó el especialista durante el encuentro en el hotel
Hilton de la Capital Federal.
El proyecto de creación de la ANETES fue elaborado por la
Comisión Nacional de Evaluación de Tecnologías en Salud, que junto con a otras
dependencias de la cartera sanitarias puso en letras los lineamientos de la
nueva agencia, que tendrá a su cargo evaluar medicamentos, aparatos y
procedimientos médicos. Según informó Salud mediante un comunicado, una vez
puesto en marcha el ANETES establecerá “en qué condiciones se usa un
medicamento, cuál es la base científica de ese uso, la relación costo-beneficio
y qué costo-oportunidad tiene, y si la solidaridad lo va a cubrir o no”.
En su presentación, Secchi hizo un cuadro comparativo con
otras experiencias del mundo para elaborar el proyecto de la agencia de
tecnología, que incluye funciones, medición de resultados, entre otras
variables. “El rol fundamental de la agencia es establecer la prioridades y el
llamado ‘costo efectivo’ para proteger la salud de la población y de los
sistemas solidarios”, destacó. En tanto, se valorizó el rol de la farmacia y el
profesional que trabaja en ella en este contexto. “Consideramos que el
farmacéutico es un eslabón importante y debemos lograr su revalorización, en la
importancia diaria que tiene, también en la reducción de la conflictividad”,
concluyó Secchi.
Fuente: Mirada Profesional