Las guarderías y jardines de infantes tendrán que informar a
las autoridades la identidad de los progenitores que rechacen información sobre
el plan de vacunación infantil.
Luego de que una mujer de 37 años, madre de tres
hijos, murió por sarampión esta semana en la ciudad de Essen, se conoció hoy un
proyecto de ley en Alemania que establece una sanción con multas de hasta 2500
euros a los padres que rechacen ser informados sobre los planes de vacunación
infantil antes de matricular a sus hijos en un jardín de infantes.
La normativa, que será aprobada el 1 de junio en el
Bundestag (Parlamento alemán), contempla la obligatoriedad de las guarderías de
comunicar a las autoridades sanitarias la identidad de los progenitores que se
nieguen a ser asesorados sobre vacunas.
"Que todavía hoy mueran personas a causa de un
sarampión, eso no nos puede dejar indiferentes. Por eso, vamos a endurecer
ahora las normas de vacunación", indicó el ministro de Sanidad de
Alemania, Hermann Gröhe, en declaraciones al diario Bild.
En Alemania no es obligatorio que los niños estén vacunados.
No obstante, desde que en el año 2015 el país se vio afectado por una ola de
sarampión, el gobierno de Angela Merkel modificó la legislación y comenzó a
exigir a los padres que entregaran en las escuelas un justificante que
acreditara que habían sido informados sobre los planes de vacunación.
Hasta ahora, sin embargo, eran los propios jardines de
infantes los que decidían si comunicaban a las autoridades sanitarias los datos
de los padres que rechazaban recibir información sobre el calendario de
vacunación infantil.
A pesar de este cambio, Alemania descarta seguir el ejemplo
de Italia, país que acaba de aprobar la vacunación obligatoria para niños de
hasta seis años que quieran ingresar en guarderías y escuelas.
"Creo que nuestras medidas servirán para lograr el
objetivo", destacó recientemente el ministro Gröhe en declaraciones a la
agencia alemana Deutsche Presse-Agentur (DPA).
El movimiento antivacunas registrado a escala global ha
llevado en los últimos años a la reaparición de enfermedades como el sarampión,
consideradas erradicadas. En Alemania, un brote de esta enfermedad afectó en
2015 a unas 2.500 personas. El año pasado, en el país se registraron 325 casos
de enfermos aquejados por esta enfermedad infecciosa y contagiosa.
Fuente: La Nación