miércoles, 30 de agosto de 2017

La COFA reclama que las farmacias no sean incluidas en el registro de precursores químicos

El nuevo Registro Nacional de Precursores Químicos podría incluir a los mostradores, algo que la Confederación Farmacéutica Argentina rechaza. Por eso, realiza varias acciones para evitar esta nueva normativa. Hubo encuentro con funcionarios nacionales y un pedido de audiencia con la ministra de Seguridad Patricia Bullrich.

En marzo de este año, el gobierno nacional dispuso una serie de reformas en el denominado Registro Nacional de Precursores Químicos (REMPRE), que controla estos productos, muchas veces usados para producir drogas de diseño. Entre los cambios, se incluyeron a las farmacias entre los establecimientos obligados a realizar una declaración jurada de sus actividades. Ante esto, la Confederación Farmacéutica Argentina (COFA) viene realizando tareas para pedir que tanto las farmacias comunitarias, hospitalarias, de clínicas y sanatorios queden afuera del registro, los mismo que las universidades que cuentan con la carrera de farmacia, unidades académicas formadoras de profesionales farmacéuticos. Se pidió una reunión con la ministra de Seguridad nacional para tratare la temática.

En estos días, la COFA difundió las tareas realizadas para evitar que las farmacias sean parte del Registro Nacional de Precursores Químicos. Entre las tareas realizadas se mantuvo una reunión con el Director Nacional del Registro, Análisis técnico y control del uso de Precursores Químicos del Ministerio de Seguridad, Carlos Brum y Ignacio Cichello, director del Registro de Precursores Químicos, haciéndose un análisis de las leyes provinciales y nacionales del ejercicio profesional farmacéutico, decretos reglamentarios, resoluciones, etc., que otorgan y determinan al profesional farmacéutico la incumbencia de la elaboración de las especialidades medicinales. Posteriormente se envió la normativa a las autoridades del REMPRE, para su estudio y análisis, siempre buscando la no superposición de controles por parte de los poderes del estado y sus respectivos ministerios, sobre los establecimientos farmacéuticos.

Además, la COFA solicitó, además, asesoramiento e informe a profesional de Ingeniería, quien concluyó que los capsuleros manual y semiautomático no estarían alcanzados por esta resolución, debido a que los mismos no revisten condición de ser máquinas. “Luego de tres meses de trabajo individual y conjunto donde se hizo un acabado análisis de la legislación, fuimos convocados por el REMPRE, junto a todas las entidades representantes de las farmacias, y el organismo aún está analizando, simplificar los trámites de inscripción y los aranceles a determinar, cuestión que fue rechazada por COFA”, destacó la entidad farmacéutica nacional.

A raíz de esto, el jueves último, la COFA convocó a la Comisión de Asuntos Profesionales de la entidad, abordando la temática en el orden nacional, acordando el trabajo en conjunto con todos los Colegios de Farmacéuticos integrantes de la institución, donde se contempló informar del asunto, a todos los Ministerios de Salud de las Provincias y a las Universidades donde se dicta la carrera de Farmacia. “Cada uno de las Colegios de Farmacéuticos agrupados en la Confederación Farmacéutica Argentina recibirán la presentación jurídica elaborada por la entidad y analizarán la oportunidad y conveniencia de adaptarla, según la ley sanitaria local, debido a que en algunas provincias es obligatorio el uso de estas herramientas mientras que en otras no lo es”, agregó la entidad.

Por último, la COFA está elaborando la impugnación a dicha resolución, presentación con alcance nacional contemplando la legislación nacional y de las provincias, “planteando a su vez, el exceso de reglamentación, el vicio en la resolución sancionada y el poder de controlador que posee cada Ministerio de Salud sobre los establecimientos farmacéuticos, destacando el servicio farmacéutico como servicio público impropio”.

Fuente: Mirada Profesional