La semana pasada, este debate debutó en la currícula universitaria con
la materia "El aborto como problema de salud" que se dicta en la
Universidad Nacional de Rosario.
La Universidad Nacional de Rosario (UNR) decidió incluir el
aborto dentro del listado de materias que ofrece la Facultad de Medicina y la
respuesta entre los alumnos fue contundente. A pesar de tratarse de una
asignatura optativa, los 80 cupos disponibles para anotarse en "El aborto
como problema de salud" no fueron suficientes para saciar la gran demanda
de los estudiantes por inscribirse, por lo que ya hay alumnos de cuarto y
quinto año en la lista de espera.
De esta manera y por una decisión unánime del Consejo
Directivo, desde ayer a las 18, el aborto se sumó formalmente a la currícula
educativa. Para acompañar este cambio, un grupo de mujeres, que lucían unos
pañuelos verdes, desplegaron una bandera del mismo color que decía:
"Campaña nacional por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito, Rosario".
Tal como publicó el medio local La Capital, la vicedecana de
la facultad, Alejandra Chervo, explicó que para la facultad esta decisión
"significa poner en blanco sobre el papel algunas cuestiones muy
importantes que están pasando hoy, todos los días, en cada uno de los centros
de salud de la región".
Y agregó: "La idea es brindar un marco teórico para los
estudiantes. En otras materias, también se da el tema, pero las situaciones que
se viven son muy graves, muy comunes, muy duras, y los futuros profesionales
tienen que saber trabajar sobre esta problemática". Por eso, quienes se
encargarán de dictar esta materia serán docentes vinculados con la Red de
Profesionales de la Salud por el Derecho a Decidir.
Además, confesó que desde la institución se sintieron
"sobrepasados" por la repercusión que tuvo esta medida: "Es la
primera en el país que lo encara de esta manera. Es algo histórico y ha causado
mucho más revuelo del que imaginábamos".
Aclaró, también, que la decisión "no representa una
cuestión de valores": "Sabemos que causa resistencia en algunos
sectores sociales, pero nosotros pensamos que las mujeres son las que mejor
conocen estas situaciones. Por supuesto que hay una cuestión de creencia, pero
esa no es nuestra intención. No queremos avasallar sobre las cuestiones de
conciencia".
Fuente: La Nación