miércoles, 13 de diciembre de 2017

Informe de la ANMAT destaca que la vacuna contra el HPV tiene “un alto perfil de seguridad”

La agencia reguladora remarcó que la vacuna contra el virus del papiloma humano “es eficaz y segura”, y destacó el perfil de seguridad que presenta. Además, se destacó el impacto positivo que tuvo en la aparición de infecciones relacionadas con este virus.

.Desde enero de este año, varones y mujeres de 11 años pueden vacunarse de forma gratuita contra el virus del papiloma humano (HPV, según sus siglas en inglés), gracias a la incorporación a Calendario Nacional de Vacunación. Desde el 2011 se aplica las dosis correspondientes a las niñas, pero por decisión de la Dirección Nacional de Control de Enfermedades Inmunoprevenibles, se amplió la recomendación a ambos sexos. La vacuna generó desde un primer momento dudas en los padres, ya que circulan por redes sociales y sitios de Internet informes sobre sus supuestos efectos adversos. Pero desde un primero momentos las autoridades defendieron su uso. Esta semana, la agencia reguladora nacional emitió un informe ultrarrápido de evaluación de tecnología sanitaria, donde destacó “la eficiencia y seguridad” de la vacuna. Según los resultados, se recomienda su uso ante el “alto perfil de seguridad” que presentan.

El trabajo de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) busca desterrar las dudas sobre la vacuna contra el HPV, una de las más cuestionadas en el mundo. El estudio concluyó que las vacunas “tienen un alto perfil de seguridad, con un balance riesgo/beneficio muy positivo a favor del beneficio”. “La vacuna contra el HPV es un instrumento de prevención primaria, pero no elimina la necesidad de realizar controles para la detección de cambios precancerosos en las células del cuello uterino”, agregó el informe final. La ANMAT destacó que la utilización de esta vacuna cuenta con el respaldo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Ministerio de Salud Pública de la Nación Argentina, la propia ANMAT y sociedades científicas nacionales e internacionales, “con elevada evidencia científica de ser muy segura y eficaz”.

Respecto al impacto observado en su uso, el informe de la agencia reguladora indica que en primer lugar “se observa que las infecciones del tracto genital y en las verrugas genitales tienen periodos más cortos de incubación para manifestarse, mientras que los efectos sobre lesiones cervicales tardan más tiempo en desarrollarse”. “Los estudios han informado de una elevada eficacia en la prevención de la infección a los 6 y a los 12 meses de recibida la primera dosis de la vacuna, con cifras que oscilaron entre el 67 al 100 por ciento”, destacó la ANMAT. La eficacia en la prevención de la neoplasia cervical intraepitelial (CIN1+ y CIN2+) “fue elevada, con cifras que fluctuaron entre el 78,2 y el 100 por ciento”.

“El impacto de la eficacia se ve reflejado en la disminución de la prevalencia (índice de individuos que padecen cierta enfermedad dentro del total de un determinado grupo de personas) de estas lesiones, siendo mayor en los países cuanto mayor sea la aceptación y adherencia a la vacuna. El mayor impacto de la aplicación de la vacuna se observó cuando la misma fue administrada antes de la exposición al virus del papiloma humano”, remarcó el informe final. “Las vacunas han sido recibidas por millones de personas. Hasta diciembre de 2015 se administraron más de 205 millones de dosis de la vacuna cuadrivalente y hasta ahora no se han registrados efectos secundarios graves causados por las mismas. El evento adverso más común es una pequeña dolencia en el sitio de la inyección, similar al que se experimenta con otras vacunas”, concluyó la ANMAT.

El HPV es una familia de virus que puede afectar a personas de todas las edades y de todos los géneros. Existen alrededor de 100 tipos de virus, de los cuales 40 afectan a la zona genital y/o anal. Por este motivo el VPH se encuentra catalogado dentro del amplio grupo de enfermedades de transmisión sexual o ETS. El VPH es muy común y se transmite fácilmente por contacto sexual. Se estima que 4 de cada 5 personas van a contraer uno o varios de los tipos de VPH en algún momento de sus vidas. Los VPH se dividen en 2 grandes grupos. Por un lado, los de "bajo riesgo oncogénico", que generalmente producen lesiones benignas como las verrugas y otras lesiones sin consecuencias graves. Por otro lado están los más temibles: los "de alto riesgo oncogénico" que pueden evolucionar a lesiones precancerosas y a cáncer. En este caso, el cáncer más frecuente es el de cuello de útero que, en Argentina, causa la muerte de 1.800 mujeres cada año. Otros tipos de cáncer causados por VPH pueden ser los de ano, pene, vagina, vulva y orofaríngeos (de boca y garganta).

Las dudas sobre los efectos de la vacuna comenzaron a circular en todo el mundo, a través de grupos “anti vacunas”, que difunden supuestos males causados por su uso. Además, muchos padres apuntan a la corta edad de los menores, cuando se trata de un mal trasmitido sexualmente. Hay varios casos circulando, pero ninguno documentado científicamente. El más extraño es el de Colombia, donde se atribuye a la vacuna el desmayo de más de 200 estudiantes. Ocurrió en 2014 en el Colegio Espíritu Santo de El Carmen de Bolívar, donde las niñas de 11 a 15 años se desplomaron involuntariamente. La misma situación se repitió en varios establecimientos. Lo único en común de las afectadas era que recibieron la vacuna. Pero el Ministerio de Salud de ese país no encontró pruebas de una relación entre el fármaco y los desmayos. El caso sigue generando hipótesis, pero los especialistas enfatizan que no puede vincularse a la vacunación.


Fuente: Mirada Profesional