Según la Encuesta de Salud para Buenos Aires, que se realiza
anualmente, los primeros tres meses de 2019 arrancaron con una fuerte deserción
en este área.
La cantidad de afiliados que tienen todas las empresas de
medicina prepaga que trabajan en Argentina no son precisos, ya que no hay un
estudio o entidad oficial que analce y difunda esta variable.
Desde hace varios años Argentina se encuentra en un proceso
de crisis económica, que a su vez impacta severamente en lo social, es decir,
en el día a día de todos los habitantes. Poco a poco todos aquellos ciudadanos
que tienen dificultades para llegar a fin de mes con su sueldo han empezado a
ajustar sus gastos en función de factores como la inflación.
La salud es una de las áreas en las que una persona o una
familia gasta parte de su dinero, aunque lo cierto es que se encuentra por
detrás de los alimentos o del mantenimiento de la vivienda. Es así que pagar la
compra del supermercado o abonar cualquiera de los servicios esenciales suele
ser más importante que pagar una prepaga o una obra social -excepto los casos
de empleados en relación de dependencia que la tienen paga por su trabajo-.
En este sentido, es importante mencionar que los costos de
las empresas de medicina prepaga han subido por debajo del ritmo de la
inflación, a través de los aumentos autorizados desde el Gobierno. Junto con la
inflación en sí misma y la falta de equiparación en los salarios, los
incrementos en el precio de las prepagas hacen que sea más dificultoso pagarlas
como servicio.
Según la Encuesta de Salud para Buenos Aires, elaborada por
los 144 colaboradores de la ONG Defendamos Buenos Aires, el Estudio Miglino y
Abogados y el Centro de Estudios de Política y Economía, los primeros dos meses
de 2019 empezaron con una profunda recesión que le costó el empleo a poco más
de 20.000 personas en el distrito que se conoce como AMBA -Capital Federal y
Conurbano bonaerense-. Según las conclusiones de esta encuesta, el impacto de
dicha pérdida de empleos tradujo en que 101.763 personas en total hayan
abandonado la empresa de medicina prepaga que habían elegido para el cuidado de
su salud.
Cabe mencionar que de ese número total más de la mitad de
los afiliados que dejaron de abonar este importe se ubicaron en Capital Federal
-57.764- y el resto en Provincia de Buenos Aires -43.999-.
"En este trabajo hicimos hincapié en cuántas personas,
merced a la crisis y la recesión, habían dejado de pagar la obra social prepaga
y el número que recogimos fue alarmante porque poco más de 100 mil personas
dejaron de pagar la ‘prepaga’", aseguró Javier Miglino, Director de
Defendamos Buenos Aires.
Es importante tener en cuenta cuál es el impacto de este
éxodo de afiliados en el sistema de salud prepaga en general. "Según la
información brindada por las distintas cámaras de salud privada de la República
Argentina, la medicina prepaga es un privilegio del que gozan el 10 por ciento
de todos los asalariados públicos y privados y el escalón de jubilados con
mayores ingresos (14 millones en total)", aclaró Miglino. Así, es posible
concluir que "ese millón cuatrocientos mil afiliados ha perdido el siete
por ciento en el primer bimestre de 2019, es decir, más de 100 mil
afiliados", según agregó el Director de la ONG.
La encuesta hizo foco en 35 núcleos urbanos de la Capital
Federal y 46 en la Provincia de Buenos Aires, incluída la ciudad de La Plata.
Dentro de todos los barrios analizados los tres que concentran la mayor pérdida
de afiliados para las prepagas en la Capital Federal son Belgrano -con 7.680
clientes menos-, Barrio Norte -con 6.968 - y Núñez -con 6.866 afiliados menos-.
Por su parte, la provincia de Buenos Aires también registró
números altos de deserción de las prepagas. Los tres barrios con mayor cantidad
de afiliados que dejaron sus coberturas de salud fueron San Isidro -con 8.578
menos-, Pilar -con 5.680 menos- y Quilmes -con 5.375 afiliados menos-.
Fuente: iProfesional