Será la primera en la provincia y servirá como un centro de
consejería para las familias que la utilicen en tratamientos. La iniciativa es
de Carlos Laje, quien fundó en Córdoba el Instituto Argentino del Cannabis.
Aunque la utilización del cannabis como medicina paliativa
de distintas patologías todavía no está aprobada ni en el ámbito nacional ni en
el provincial, en los próximos días se inaugurará en la Ciudad la primera
clínica de cannabis medicinal de Mendoza. La ley que aprueba su uso tiene en la
provincia media sanción de Senadores y espera la aprobación de la Cámara de
Diputados.
El doctor Carlos Laje, fundador de la primera clínica de
cannabis medicinal del país, que se encuentra en Córdoba, es quien inaugurará
en los próximos días el mismo espacio en Mendoza.
"Nosotros llevamos a Mendoza la propuesta a la
Provincia y a las autoridades de Ciudad también, que es la misma que venimos
llevando hace un año a través del Instituto Argentino del Cannabis, que es el
que tenemos conformado. La propuesta es armar en cada capital provincial y en
ciudades importantes, lo que denominamos clínica del cannabis", expresó
Laje.
Estas clínicas funcionan principalmente coordinadas por
alguna mamá o familiar de algún niño con problemas y que esté usando cannabis.
Se trata de un espacio físico que, generalmente, son casas de familias que lo
prestan para, a partir de ahí, armar la consejería en salud cannábica.
A la persona que quede a cargo, que seguramente será elegida
hoy cuando finalice la charla que el doctor dará en la provincia (ver aparte),
se la formará en Córdoba para que pueda ocupar ese rol en Mendoza y, una vez
por mes, Laje viajará para reunirse con los pacientes de las diferentes
patologías.
Es decir, no será una clínica tradicional como su nombre lo
indica, sino más un lugar al que las familias puedan recurrir para buscar
información.
"La idea es que vengan a sacarse las dudas, consultar
sobre el tema, aprender, y no tener que googlear y luego salir a un lugar no
apto para la familia a conseguir no saben bien qué. La idea es abrirla lo antes
posible", continuó el oftalmólogo.
Además, explicó que vía Facebook, muchos mendocinos lo
contactaron para erigirse como coordinadores y brindar el espacio físico, por
lo que "seguramente el miércoles ya veremos a algunos pacientes en el
lugar que consideremos más adecuado para hacerlo".
La situación legal
Tanto en el ámbito nacional como en el provincial, el
proyecto que tiene como objetivo la provisión medicinal del aceite de cannabis
–denominado Charlotte's Web– para pacientes que padecen epilepsia refractaria y
demás patologías derivadas, tiene media sanción y espera la aprobación total.
En Mendoza fue aprobado por la Cámara de Senadores y resta confirmación de
Diputados, mientras que en el Congreso nacional la situación es inversa, ha
sido aprobada por Diputados.
En ese sentido, Laje considera que los políticos corren
detrás del avance de la sociedad. "Más allá de la media sanción o la
sanción completa, creo que hay que crear un instituto de regulación argentino
del cannabis, que sea nacional y tenga correlación en las provincias, donde hay
que asegurarles a las personas la accesibilidad. No pueden estar esperando que
haya una ley que contemple la epilepsia refractaria y deje afuera a más de 44
enfermedades que en el mundo se están tratando con cannabis".
Además, consideró fundamental que la comunidad médica lance
un plan de capacitación, docencia e investigación sobre el tema, ya que los
pacientes cada vez más lo piden y los médicos "no pueden no saber de qué
se trata o solo conocer vía internet".
Para lo que sí es fundamental la aprobación de las leyes es
para que el acceso sea legal y económicamente más accesible para las familias,
llegando también a quienes no tienen recursos para obtenerlo de ninguna manera,
a través de la cobertura estatal.
Lo que no se contempla aun en los proyectos aprobados con
media sanción, es el autocultivo, que es lo que reclaman las organizaciones
como Mamá Cultiva, para que no se criminalice a quienes lo practiquen como si
lo hicieran para tráfico.
Fuente: Diario Uno