El artículo 81 obligaba a las prepagas a incrementar sus
aportes a un fondo del sistema de salud. Las empresas sostienen que eso iba a
subir las cuotas.
El miércoles por la noche, a última hora, y por gestiones de
la empresas de medicina prepaga, el Gobierno aceptó eliminar el artículo 81 del
proyecto de ley ómnibus que tratará el Congreso esta semana.
Ese artículo establecía que todas las modalidades de los
planes de las prepagas ( “superados o complementarios por mayores servicios que
comercialicen los Agentes del Seguro de Salud ”) debían contribuir al Fondo
Solidario de Redistribución del sistema, como aportan los afiliados a las obras
sociales.
Esa contribución equivale al 15% del descuento sobre el
aporte de salud del trabajador que retienen las empresas y de la contribución
de los empleadores y es administrada por la Superintendencia de Servicios de
Salud.
Con esos fondos, la Superintendencia reintegra determinados
gastos de medicamentos e intervención médica de altos costos en salud de las
obras sociales y redistribuye otra parte entre las obras sociales que reciben
aportes más bajos por contar con mayor cantidad de afiliados de sueldos más
bajos.
El argumento de las prepagas fue que si se aprobaba ese
aporte del 15% directo o sobre la diferencia entre el plan privado y el aporte
del trabajador en los casos en que se derivan los aportes a la prepaga, los
obligaba a encarecer aún más la cuota de los planes que pagan esos afiliados
para compensar el aporte al Fondo de Redistribución. Y en el último período
muchos afiliados de prepagas se pasaron a planes más bajos o se desafiliaron
por no poder seguir afrontando el pago de las cuotas.
Las prepagas sostuvieron que están dispuestos a discutir ese
aporte pero dentro de un plan integral que reordene todo el sistema.
El reclamo fue canalizado a través del Ministro de Salud,
Ginés Gonzáles García, quien lo habría conversado con el Presidente Alberto
Fernández.
Fuente: Clarín